Previo a la instalación de la malla se debe realizar el acondicionamiento del área eliminando los desniveles y las cárcavas que pudieran estas presentes en el talud.
La instalación se ejecuta desde la parte superior del talud.
Se debe disponer de una zanja para anclar la malla, a una distancia no menor a 1 metro del borde del talud.
La malla volumétrica se fija en el interior de la zanja con piquetas de sujeción. A continuación, se rellena la zanja compactándola para aumentar su resistencia.
Una vez colocada y asegurada la malla volumétrica en la zanja, se coloca el material sobre el talud siguiendo el sentido de bajada del talud.
El material debe solaparse entre 10 y 20 cm entre rollos, y colocarse piquetas de unión. Una vez terminado el proceso de instalación de la geomalla, se revisa el estado de las piquetas de unión entre rollos, y se procede a recubrir con sustrato o hidrosiembra para la regeneración de la cubierta vegetal del talud.